Dermoestética oncológica
Los tratamientos oncológicos para el tratamiento del cáncer son altamente invasivos y dañan las células en cualquier tejido del cuerpo. Por lo que la piel, al ser el órgano más extenso, no está exenta de estos daños. Desde la medicina estética oncológica y de una forma integrativa, dentro de un trabajo multidisciplinar podemos ayudar a cuidar al paciente oncológico con protocolos dermocosméticos personalizados y así es como trabajamos en nuestra clínica Dra. Nuria Ugarte, centrando nuestro objetivo en la mejora de la calidad de vida del paciente.
Efectos secundarios en la piel de un paciente oncológico
Como consecuencia de los medicamentos ingeridos y del tratamiento en sí, la piel puede sufrir diferentes daños o inconvenientes que pueden persistir incluso tras la finalización del tratamiento.
Sensibilidad en la piel
Por todos los efectos antes mencionados, como la deshidratación o los daños celulares, además de los desequilibrios endocrinos que genera el tratamiento, la piel se vuelve sensible, pudiendo alcanzar niveles donde se daña con excesiva facilidad incluso ante contactos leves.
Micropigmentación oncológica
Es una técnica que ha demostrado ser especialmente eficiente para lidiar con los daños generados en la piel por la quimioterapia. Se busca corregir o camuflar estrías, cicatrices, manchas, diseñar cejas e incluso areolas tras un cáncer de mama. Se injerta pigmento en la capa superficial de la piel en el área que se desea tratar con el objetivo de mejorar su aspecto. Puede repercutir a corto y largo plazo en la mejora del bienestar y en la autoestima del paciente.
Tratamientos para prevenir daños en la piel por quimioterapia
- Antes de la quimio: los daños por el tratamiento son inevitables, por lo que el paciente deberá informarse sobre cómo reducirlos al máximo. Estudiar las posibilidades en cuanto a cuidados, dieta y qué hábitos eliminar. Además deberá informarse sobre qué productos estéticos pueden aplicarse, como obtener productos no agresivos para el cuidado de la piel, de preferencia con pH neutro.
- Durante: un especialista deberá evaluar el caso particular para identificar cómo reducir los daños que se empiezan a presentar. Utilizar protector solar de al menos FPS 50 o superior además de mantener un cuidado de la piel de forma rigurosa, lavándola e hidratándola diariamente.
- Después: informarse con un médico sobre las técnicas de dermoestética oncológica pertinentes para el caso. Al finalizar el tratamiento se busca reparar los daños que ya se han generado en la piel. Además de identificar y lidiar con las posibles secuelas que deje el tratamiento.
Micropigmentacón oncológica
Es una técnica que ha demostrado ser especialmente eficiente para lidiar con los daños generados en la piel por la quimioterapia. Se busca corregir o camuflar estrías, cicatrices, manchas o para diseñar cejas. Se injerta pigmento en la capa superficial de la piel en el área que se desea tratar con el objetivo de mejorar su aspecto.
Al permitir cambiar una zona de la piel con un tono distinto al que se tiene actualmente se pueden disimular ciertos desperfectos sin necesitar un procedimiento quirúrgico. Puede repercutir a corto y largo plazo en el autoestima del paciente. También le ayuda a disminuir las secuelas de un procedimiento tan extenuante.
¿Cómo mantener sana la piel de un paciente oncológico?
Entre algunas de las recomendaciones generales podemos comentar las siguientes:
- Eliminar los perfumes o productos dermocosméticos que contengan alcoholes ya que pueden irritar la piel.
- Utilizar cremas o lociones profundamente hidratantes y humectantes.
- Evitar la exposición a luz UV, usar protector solar y renovarlo cada 2
- Si aparece acné, no presionarlo ni usar medicamentos tópicos sin consultar a un médico.
- No realizar exfoliaciones durante el tratamiento que puedan lesionar la piel .